10 conceptos básicos sobre energía nuclear

En la rutina, en el bolsillo, en la industria. Subir al autobús o abrir tu coche a cuatro metros de distancia. La energía está y estará en nuestras vidas. Para entenderla mejor, veamos de cerca una de las fuentes: la energía nuclear. Más allá de protones y neutrones, vatios y…

10 conceptos básicos sobre energía nuclear

En la rutina, en el bolsillo, en la industria. Subir al autobús o abrir tu coche a cuatro metros de distancia. La energía está y estará en nuestras vidas. Para entenderla mejor, veamos de cerca una de las fuentes: la energía nuclear.

Hay diferentes tipos de centrales, unas cubren el reactor con un edificio cuadrado, otras con una bóveda, y no todas necesitan torre de refrigeración. Foto: T. Royo.

Hay diferentes tipos de centrales, unas cubren el reactor con un edificio cuadrado, otras con una bóveda, y no todas necesitan torre de refrigeración. Foto: T. Royo.

Más allá de protones y neutrones, vatios y voltios, de facturas y reformas políticas, de las movilizaciones ecologistas y demás debates, la energía nuclear forma parte de nuestra vida. ¿El motivo? Llega a todas nuestras casas a través de la red eléctrica. Por ello, para comprender mejor, nos acercamos a la energía nuclear a través de diez conceptos generales clave.

El proceso nuclear en sí

1. Dice Wikipedia que la energía nuclear es la energía que se libera espontánea o artificialmente en las reacciones nucleares. Algunos elementos químicos poseen ciertas características que posibilitan esas reacciones.

2. “En física nuclear, la fisión es una reacción nuclear que tiene lugar en el núcleo atómico”. Ese núcleo se divide en núcleos más pequeños, y ese proceso libera energía.

3. Es en las centrales nucleares donde se utiliza esa reacción a gran escala para generar energía nuclear tomando el uranio como principal combustible.

4. Esa gran reacción se produce en el reactor nuclear. Hay diferentes tipos, por eso unas cubren el reactor con un edificio cuadrado, otras con una bóveda, o unas necesitan una torre de refrigeración y otras no, por ejemplo.

Residuos y uranio

5. Sean de un tipo u otro, todas necesitan disponer en su instalación de unas piscinas. En ellas se almacena ese uranio ya utilizado para enfriarlo (a veces hasta 20 años). Es lo que se suele denominar como combustible nuclear gastado.

6. Ese combustible es el principal residuo que generan las centrales nucleares. Por sus condiciones tiene una alta radiactividad así que necesitan una gestión cuidadosa (más que los generados en el ámbito médico, por ejemplo, pues estos son habitualmente de baja y media radiactividad).

7. España no cuenta con una instalación que acumule todos esos residuos de las centrales nucleares, cada central los mantiene en sus propias piscinas. Por eso desde hace dos años el Gobierno trabaja en el proyecto de un Almacén Temporal Centralizado. La ubicación elegida hoy en día es Villar de Cañas (Cuenca).

Gestión y seguridad

8. El responsable de la supervisión de la gestión de las centrales nucleares españolas es el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), ente público cuyas funciones son, por ejemplo, el control de las instalaciones y de las dosis de los trabajadores, la actuación en caso de emergencia, proponer reglamentación y normativa o informar a la opinión pública y a las Cortes.

9. Una central nuclear necesita un permiso de explotación otorgado por el Ministerio de Industria que indica la fecha hasta la que puede estar en funcionamiento. Para la toma de esas decisiones el CSN elabora informes con recomendaciones. Siempre se produce un gran debate en torno a esta cuestión porque los límites de la vida útil de una central nuclear (durante cuánto tiempo puede estar en funcionamiento siendo segura) son entendidos de forma diferente por la industria, por el Gobierno y por los movimientos sociales.

España no cuenta con una instalación que acumule los residuos de las centrales nucleares, cada una los mantiene en sus propias piscinas. Foto: Toni Rodrigo.

España no cuenta con una instalación que acumule los residuos de las centrales nucleares, cada una los mantiene en sus propias piscinas. Foto: Toni Rodrigo.

10. ¿Qué pasa cuando se produce un accidente? El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), organización internacional vinculada a Naciones Unidas, estableció la Escala Internacional de Eventos Nucleares (INES, sus siglas en inglés), que dispone de siete niveles de gravedad, de cero a siete. En el nivel siete, accidente mayor, se encuentran las catástrofes de Chernóbil (1986) y Fukushima (2011). Los accidentes españoles en centrales se han considerado como nivel tres, incidente grave, (Vandellós, 1989), y nivel dos, incidente, (Ascó, 2008). El resto de sucesos, denominados ‘no programados’, son comunicados al CSN por cada central, y éste indica la gravedad e inicia los protocolos correspondientes.

España cuenta hoy con seis centrales nucleares: Almaraz (Cáceres), Ascó (Tarragona), Cofrentes (Valencia), Santa María de Garoña (Burgos), Trillo (Guadalajara) y Vandellós (Tarragona). Aunque en total son ocho reactores puesto que Almaraz y Ascó cuentan con dos en sus instalaciones.

Siempre de actualidad, la energía nuclear es observada de cerca, se produzcan o no accidentes, sean el objetivo de campañas ecologistas o no, estén en marcha o no. Y dada la evolución energética mundial todavía serán el centro de las noticias y de las charlas en torno a un café durante bastante tiempo.