Entre la crisis económica y la irrupción de las nuevas tecnologías, el empleo del futuro tendrá poco que ver con el actual. La start-up valenciana Gigoing asume esta tendencia para poner en marcha una plataforma que pone en contacto a viajeros y profesionales que quieran mejorar su experiencia internacional con empresas de todo el mundo que alojan y dan manutención.
Así de sencillo. A partir de ahora los mochileros deberán dejar algo de espacio en el macuto para guardar sus habilidades. Un recurso muy útil para aquellos trotamundos de bolsillo ajustado y también para el ejército de profesionales freelance que ven la coyuntura actual como un buen momento de adquirir nuevas vivencias fuera de sus países. “La clave de nuestro negocio es una respuesta a la nueva realidad laboral, la cultura gig, la evolución natural del mercado de trabajo, que permite al individuo crear valor, organizarse y comunicar su talento en las nuevas redes de contactos laborales en los que desarrollará su actividad. En Gigoing promovemos la adquisición de experiencias y vivencias únicas alrededor del mundo mediante la fórmula del intercambio, facilitamos el contacto entre profesionales que se ofrecen como voluntarios y entidades (organizaciones, empresas, personas, etc.) dispuestas a alojarlos”, afirma Beni Baixauli, CEO y cofundador de Gigoing, fusión de los términos ‘gig’ y ‘going’.
Los otros dos socios fundadores son Ignacio Mas, que aporta la visión estratégica y financiera del negocio, y José María García, que asume la parte creativa y tecnológica. Ambos, curtidos en la firma Canica Valor Estratégico en campos como la comunicación, el marketing, la publicidad, la gestión empresarial y la tecnología multimedia, son el complemento perfecto para Beni Baixauli: viajero empedernido. Corazón de un proyecto que nace de sus viajes por el mundo, financiados la mayoría a costa de trabajar y colaborar en entidades que iba encontrando por el camino. “Llevo viajando desde que tenía 18 años, que me fui a Kenia. He vivido en India, Guinea Ecuatorial, Nepal, Laos, Camboya, México, Sri Lanka… en muchos sitios. No es cuestión de tener una cuenta bancaria potente, que no es el caso, me he ido buscando la vida en esos lugares. Después de tanto viaje pensé que sería interesante para el viajero ávido de experiencias montar una plataforma así”, asegura Baixauli.
El éxito de esta iniciativa es conjugar el áurea romántica que aporta Baixauli y su forma de entender el viaje (la mentalidad es “esperar lo inesperado” en cada aventura, afirma) con el control y el análisis estratégico de Mas y García. Tanto que Gigoing fue la única empresa valenciana seleccionada para formar parte de la primera edición de Spain Tech Week en Silicon Valley, San Francisco, del 27 al 31 de mayo. Y la meca de los emprendedores guiñó el ojo a esta propuesta, que algún participante acuñó como “el ecommerce de las habilidades”, dice Baixauli con una sonrisa. Con motivo. “Unas 6.000 start-up buscan, cada día, financiación allí”, destaca. Un guiño es mucho.
El movimiento ‘gigonomics’
La situación en España parece propicia para que se asiente el movimiento ‘gigonomics’, en el que se apoya Gigoing, y que supone un cambio radical en la concepción del empleo. “Un nuevo término para referirse a un cambio en la economía y en el mercado laboral compuesto por freelances, proyectos y trabajos a tiempo parcial, profesionales que colaboran a corto plazo y en proyectos concretos, el outsourcing y el fin de la lealtad a las empresas”, aseguran desde la start-up valenciana. “La semana pasada un conocido portal de empleo publicaba un informe que afirmaba que dos de cada tres jóvenes buscan trabajo fuera de España. Estos datos coinciden con el imparable crecimiento de autónomos que ha experimentado nuestro país en el último año, como respuesta natural a la reducción de los presupuestos por parte de las empresas”. Gigoing dispone de un caldo de cultivo idóneo para crecer. Aunque la sopa carece de un ingrediente: “en España falta mucha cultura de viaje”, lamenta Baixauli.
Por esta razón la web de Gigoing ha nacido en inglés (a principios de 2014 también se podrá leer en español y francés). En la cultura anglosajona está la raíz de lo que Baixauli entiende como viajero, diferente del turista. “El viajero no planifica con tanto detalle como el turista, viaja con mochila y billete de ida y vuelta… con la premisa del ‘donde caigo caigo’. Improvisar. Esperar lo inesperado. Si vas muy cerrado, con demasiados prejuicios, te pierdes muchas cosas”, subraya.
“El viajero no planifica con tanto detalle como el turista. Si vas muy cerrado, con demasiados prejuicios, te pierdes muchas cosas», dice Baixauli
Gigoing se une a la tendencia marcada por plataformas como WWOOF (World-Wide Opportunities on Organic Farms), una red de granjas orgánicas que intercambian trabajo por alojamiento, o Couchsurfing, que invita a vivir una experiencia altruista y única conectando a viajeros que buscan cobijo con anfitriones dispuestos a cederlo gratuitamente. El sistema es similar. 30 euros anuales cuesta ser un ‘gigoinger’, lo que permite acceder a todos los contactos (‘gigplaces’) que hay en la plataforma durante ese año. De momento se puede elegir entre unos 300 ‘gigplaces’ (Brasil, Argentina, India, Tailandia, España…), que requieren desde un trabajo de voluntariado relacionado con la salud hasta desarrolladores web, camareros, diseñadores o maestros de yoga. “Tengas la habilidad que tengas –enfatiza Baixauli- alguien en este mundo estará encantado de acogerte”.
Comentarios
2 Responses to “De viaje con mis habilidades”
Mucha suerte para esta genial idea que seguro que promueve la apertura de mente de muchos españoles en paro!!!