Las revistas de lo bonito

Pese a todo, hay personas que disfrutan leyendo en papel. Pasar página a página. Si el contenido, además, es sobre algo que te apasiona, lo tiene todo. Pero poca gente imaginaría que la costura, las cosas hechas a mano o la repostería creativa llegarían tan lejos: a la imprenta. «Queríamos…

Las revistas de lo bonito

Pese a todo, hay personas que disfrutan leyendo en papel. Pasar página a página. Si el contenido, además, es sobre algo que te apasiona, lo tiene todo. Pero poca gente imaginaría que la costura, las cosas hechas a mano o la repostería creativa llegarían tan lejos: a la imprenta.

'El Costurero Magazine' es una revista trimestral, con 70 páginas sobre costura, manualidades, espacios creativos y reseñas de diseñadores y artesanos, tanto conocidos como anónimos. Foto: Pineal Estudio.

‘El Costurero Magazine’ es una revista trimestral, con 70 páginas sobre costura, manualidades, espacios creativos y reseñas de diseñadores y artesanos, tanto conocidos como anónimos. Foto: Pineal Estudio.

«Queríamos crear un objeto que destilara emociones, con un contenido y diseño cuidado cuya información ‘no caducase’. Pero acompañado de un blog con otro tipo de temática. Evolucionamos, no nos cerramos a hacerla solo en papel o solo en digital. Al contrario cada vez queremos hacer más cosas, y en cualquier formato. El papel nos permitirá incluir patrones a escala, difícilmente posible en digital, pero la red nos permite cultivar otro tipo de contenido y relaciones». A través de estas palabras, Anabel García demuestra el entusiasmo por su proyecto: ‘El Costurero Magazine’, una revista que se publica cada tres meses y que ya tiene en su haber tres números. En sus más de 70 páginas incluye temas como costura (incluso patrones para pasar a la práctica), manualidades, espacios creativos y reseñas de diseñadores y artesanos, tanto conocidos como anónimos. Cuesta 5,50 euros y está a la venta a través de su web, en tiendas especializadas y en los centros Fnac en todo el país.

«La idea de ‘El Costurero’ surgió hace varios años, antes del ‘boom’ por el ‘arts&crafts’. Nace de una inquietud personal por el mundo de la artesanía contemporánea, por el movimiento ‘arts&crafts’ y por el periodismo. Primero colaborando con blogs sobre el tema como ‘WhipUp’, después creando la revista online welovecrafts y finalmente dando el salto al papel con ‘El Costurero'». García, directora, editora y también redactora, comenta que antes de decidir la publicación en papel evaluaron el mercado «desde otro punto de vista, no pensando en una distribución tradicional», valorando la publicación no solo por su contenido, también por su forma. «Tampoco hemos querido incluir publicidad en la revista, aunque no lo descartemos nunca será nuestro principal modelo de negocio».

Los resultados del Estudio General de Medios a lo largo de 2012 han dado valores con tendencia negativa a la venta de revistas. Las semanales, sobre todo las de ‘corazón’, han sufrido un 6% de pérdida de seguidores. El grupo editor de revistas G+J ha justificado los más de 200 despidos en los últimos años debido a la caída de las ventas de las publicaciones y de la publicidad. Revistas juveniles como ‘Súper Pop’, ‘Ragazza’ o ‘Nuevo Vale’ han cerrado tras más de 30 años en los kioscos. La mezcla de la crisis económica, la reducción de la inversión en la publicidad y todo lo que implica la revolución digital está suponiendo la desaparición del modelo de revistas como lo hemos conocido hasta ahora.

Varias portadas de 'Kireei', “la revista de las cosas bellas”. Foto: Kireei.

Varias portadas de ‘Kireei’, “la revista de las cosas bellas”. Foto: Kireei.

Por eso sorprende que hoy se apueste por la publicación en papel. Y, sobre todo, si el contenido es sobre algo tan específico como la costura. ‘El Costurero Magazine’ ha tenido que reeditar varias veces sus ejemplares; y acaba de publicar su tercer número. El reconocimiento de sus lectores parece el mejor de sus premios. Decidieron hacer lo que todo apuntaba a ser una locura. ¿Por qué publicar en papel si se puede hacer en internet?. Su directora afirma que el modelo de negocio digital «aún no está claro». «Nos dirigimos a una gran masa. Somos un equipo pequeño que edita una pequeña publicación para unos lectores muy concretos. Permanecer pequeño es una cualidad positiva para nosotros», concreta.

Pero no es el único que ha apostado por la imprenta. ‘Bricorepostería’ ofrece 52 páginas dedicadas a la repostería creativa. Editada por Dulces Publicaciones, cuenta con casi 15 números con periodicidad bimensual y a un precio de cuatro euros. Colaboran, como redactores, blogueros y reposteros reconocidos, y llega a los kioscos a través de una distribuidora nacional.

El fieltro es una de los materiales estrella para los amantes de las manualidades. Foto: Kireei.

El fieltro es una de los materiales estrella para los amantes de las manualidades. Foto: Kireei.

Un espacio por cubrir

Pero si hay que elegir un referente en el mundo de las revistas de handmade, de lo hecho a mano, es ‘Kireei Magazine’, bautizada como «la revista de las cosas bellas». De carácter semestral también acaba de publicar su tercer número. Cuenta con 1.000 suscripciones (venta online), una tirada de 8.000 ejemplares, y 116 páginas que se imprimen en Valencia. La principal vía de venta es a través de tiendas especializadas y relacionadas con esta temática. «Empezamos con el blog hace cuatro años y la revista en papel comenzó hace un año. Vimos que no había revistas como esta, que había un nicho, un espacio por cubrir, no había una competencia clara. Cuando teníamos suficiente base de seguidores en internet pasamos a papel, todo lo contrario a lo habitual». Cristina Camarena es directora, editora y redactora de ‘Kireei Magazine’. «El mensaje básico de Kireei es disfrutar las cosas con calma, todo lo hecho a mano, valorar más la calidad que la cantidad. En realidad es un producto de consumo físico, la última esencia del handmade es tener y valorar el producto en la mano».

En su éxito ha influido el auge del mundo artesanal en España, aunque en otros países ya lleve años. Anabel García confirma que ‘El Costurero’ no comenzó cuando ya existía esta tendencia pero ahora ha coincidido. «Se nota que mucha más gente se interesa por el tema que hace unos años. Tal vez sea porque nuestra actitud de consumo ha cambiado, por la crisis y por una conciencia más ecológica. Hacer algo por uno mismo puede ser más económico, más sostenible, más ecológico, pero también muy satisfactorio, e incluso una forma de iniciar un negocio».

Desde ‘Kireei’, Cristina Camarena está de acuerdo. «La gente busca otras cosas. Un modelo se ha agotado y necesitamos otra manera de funcionar. Esto tiene más encanto, más fundamento, se aleja de todo lo que ha ocasionado la crisis: las prisas, el capitalismo brutal, vivir para trabajar en lugar de trabajar para vivir. Es algo que la gente está buscando, un poco de paz, de belleza, de serenidad, cosas bonitas. Una ventana de aire fresco».